martes, 15 de diciembre de 2009

¿SER piente O NO SER piente?


El gobierno está sacando una publicidad comparando a la prensa con una víbora difamadora. El eslogan dice: Libertad de expresión sí, libertad de difamación, NO! ...
¡Síiiiiiiiiiii! ¡Leyeron bieeeen! ¡Contra la difamación! ¡DIFAMACIÓN!... Y díganme... ¿qué hace esta campaña entonces? ¿En qué quedamos? Son de Ripley, francamente!

1 comentario:

David Zambrano. dijo...

¨El más grande poder fáctico¨, que a la prensa hay que ¨destruirla¨ o ¨hay que controlar la prensa¨. Afirmaciones vitandas de parte del hombre que se jacta de su academicismo, pero que nunca lo demuestra, que acusa de doble moral a la prensa, pero que practica esa misma doble moral con las perversas publicidades como la de la serpiente (supongo que hay que agradecerle a los Alvarado por la demostración de pluralismo y ataraxia de la publicidad, imagino que ellos son la cobra, perdón, los que cobran los réditos), la libertad de expresión de este régimen es la libertad de difamar, lo que exactamente critican a la prensa en la publicidad ¿Doble moral? Seguro, por supuesto.

Escuchar a Correa hablar de que la prensa es el ¨más grande poder fáctico¨ y argumentar que la prensa debe ser regulada por la sociedad, cuando no existe otro régimen en la historia contemporánea con mayor poder y con mayor impunidad que este es de un cinismo descomunal.

Solo hay que escuchar las cadenas hebdomadarias para ser testigos de que la impunidad de Correa es total, revisen el artículo 11 acápite 2 de la constitución y escuchen una cadena, es obvia la cantidad de veces que Correa viola ese artículo en sus verborragias.

Y hay un error de conceptos en lo de los poderes, un error de conceptos intencional, en lo de que la prensa debe ser ¨controlada¨ por la sociedad, lo que ellos buscan es control estatal, que pueda ser influenciado por Correa, para evitar que la prensa siga desenmascarando la corrupción e incapacidad del régimen, cuando en las democracias los funcionarios públicos están expuestos a la crítica de la prensa y de la ciudadanía, esa crítica puede ser en ocasiones hasta mordaz pero debe ser respetada y hasta se debe estimular.

Aunque a veces la prensa no es necesaria para exponer los males del gobierno, los apagones son un ejemplo, vamos a ver quien es el culpable de la proclama incumplida de Correa, la ¨prensa corrupta¨, los ¨mismos de siempre¨, los ¨pelucones¨, o la ¨madre naturaleza¨, que opciones no le faltan.